La arquitectura y su reverso
Autor/es:
Crispiani, Alejandro
Fecha:
2011Resumen
Se calcula, o al menos esas fueron las cifras que se manejaron en
un principio, que más de un millón quinientas mil viviendas
quedaron dañadas, en diferentes grados, que fueron desde
la destrucción total a daños menores, en el último terremoto
y posterior tsunami ocurrido en Chile el 27 de febrero de 2010.
Por muy inmunes que los medios de comunicación masiva y la
información general que solemos manejar nos hayan vuelto a este
tipo de cifras catastróficas, el grado de destrucción que éstas
muestran no debería dejar de conmovernos y de interpelarnos a
todos los que de una u otra forma estamos vinculados a los
procesos de construcción de la ciudad y los edificios. Pero aún
así, aunque con un esfuerzo de la imaginación tratemos de visualizar
y comprender la magnitud del daño que esto supone, esta
cifra de todas maneras resulta engañosa y reductiva. Entre otras
razones, porque aunque hayan quedado sin daños e incólumes,
una enorme porción de las construcciones en Chile (sin excepción
la totalidad de las pertenecientes a las regiones V, VI Y VII)
fueron sacudidas desde sus cimientos y todo su contenido, material
y humano, sometido a un virulenta oscilación. La experiencia
de lo que podríamos llamar el habitar, tan naturalizada en todos
los sentidos, se vio así violentamente trastocada.