| dc.description.abstract | Hoy, el mundo del trabajo nos condiciona a enfrentar un nuevo orden futuro. El impacto en la economía y en el mercado laboral de las innovaciones tecnológicas, que suceden a una velocidad cada vez mayor, sugiere el tránsito hacia una nueva era, la cuarta Revolución Industrial. Esto plantea un poderoso desafío para quienes piensan las políticas públicas. En la nueva ecuación socio-económica convivirán sectores y actividades de alta productividad, que en la Argentina son los menos desarrollados, con otros más atrasados, los de actividades de muy baja productividad, ello en conjunto con las economías agrícolas de subsistencia o las urbanas con un muy alto grado de informalidad y bajísimo uso de tecnología.
En el marco de este trabajo se entiende que, actualmente, las políticas públicas enfrentan un doble desafío. Por un lado, se deben preparar para acompañar la marcha de los cambios tecnológicos para intentar predecir su impacto en el mundo del trabajo; y, por otro, deberán resolver viejas cuestiones que han renacido bajo fuertes cambios de paradigmas, como las del ámbito de la discapacidad.
Entender cuáles son las debilidades de los instrumentos políticos utilizados para resolver temas sensibles como los vinculados con las áreas de discapacidad (viejas cuestiones) y de trabajo (cuestiones renovadas) otorga la posibilidad de rediseñar esquemas de nuevas y posibles soluciones. Por ello, el Estado y la sociedad deben sincerar su responsabilidad sobre las consecuencias derivadas de la aplicación de malas políticas vinculadas, en este caso, con la falta de oportunidades. Esto colocará tanto a los decisores políticos como a los ciudadanos a otro nivel, es decir, frente a nuevos dilemas éticos o morales. | es_AR |
