Políticas para la mejora educativa sistémica: el caso de la Enseñanza Media en Pernambuco (2007-2019)

Abstract

Los sistemas educativos de América Latina tienen dificultades para garantizar aprendizajes de calidad y trayectorias continuas y completas para la totalidad de adolescentes y jóvenes en la secundaria. A pesar de sus esfuerzos por implementar políticas para resolver esta situación, pocos logran consolidar procesos de mejora educativa sistémica. Distintas investigaciones señalan que Pernambuco, estado del nordeste de Brasil, es un caso excepcional que logró mejorar de modo generalizado y sostenido las trayectorias y los aprendizajes en la Enseñanza Media. El objetivo de la investigación es comprender cómo la política de Enseñanza Media de Pernambuco contribuyó a la mejora educativa sistémica entre 2007-2019. Para ello, utiliza la lente analítica de la corriente de la reforma cultural de los sistemas educativos. El análisis se basa en el enfoque metodológico de estudio de caso. Los hallazgos ratifican que Pernambuco mejoró sustancialmente las trayectorias y los aprendizajes de sus estudiantes, especialmente de quienes asisten a las escuelas del programa de Educación Integral. La mejora coincide con la implementación de una estrategia de política con cuatro componentes principales: (i) la expansión del Programa de Educación Integral; (ii) la reforma del currículum y del modelo de gestión; (iii) la mejora de la Infraestructura, el equipamiento y la alimentación; (iv) y otras iniciativas relevantes. La estrategia parece reflejar la presencia de la mayoría de los factores clave para la mejora educativa sistémica propuestos en la literatura de la reforma de la cultura de los sistemas educativos: dar prioridad política a la educación; tener un enfoque sistémico; desarrollar una estrategia integral y coherente; promover una visión y prioridades comunes; establecer metas claras y compartidas; intervenir en todos los niveles del sistema favoreciendo la comunicación; promover la motivación intrínseca y desarrollar capacidades de estudiantes, docentes, y personas con cargos de dirección y gestión: y garantizar los recursos necesarios y utilizarlos eficientemente. Se encuentra un posible punto de tensión entre el desarrollo de aprendizajes integrales y el riesgo de obsesión académica vinculada al modelo de gestión.