AUTOMONUMENTO VERBORRAGICO Super Rascacielos atrial de recesos compensados
Metadata
Show full item recordAuthor/s:
Carosso, Renata
Casaseca, Agustina
Dieguez, Julián
Fernandes,Juan Manuel
Advisor/s:
Potap, Johanna
Mensa, Manuel
Pringle, Andrew
Pomsztein, Melissa
Torres Agüero, Lucas
Thesis degree name:
Carrera de Arquitectura
Date:
2020Abstract
"El súper rascacielos establece un nuevo umbral, respecto de la tipología de rascacielos, de constante auto superación y polarización cuantitativo-cualitativa, sin la intención de encontrar formas contenidas, racionales y medidas, si no, por el contrario, resultando en una escala incomprensible que se escapa de lo preestablecido, normado y teorizado. El súper rascacielos está en constante evolución, es una tipología que explota incansablemente sus límites, y que, quienes los proyectan, en lugar de intentar comprenderlos, los profundizan y analizan sus posibilidades hasta llegar a sus puntos de quiebre. El súper rascacielos invita a fantasear, al mismo tiempo que a estudiar cada una de sus partes y posibles factores de peligro, para así acercarse cada vez más a su autodestrucción.
“[La belleza dionisíaca] Se trata de una belleza alegre y peligrosa, totalmente contraria a la razón y representada a menudo como posesión y locura: es el lado nocturno del apacible cielo ático, que se puebla de misterios iniciáticos y de oscuros ritos sacrificiales, como los misteriosos eleusinos y los ritos dionisíacos”(01) .
Manhattan es la ciudad catálogo de modelos y precedentes, contenedora de experimentos arquitectónicos y espectáculos humanos en constante realización, “(…) es una acumulación de posibles desastres que nunca ocurren”(02) . En este contexto, se despliega una enorme cantidad de edificios de la tipología de rascacielos y súper rascacielos. Los casos que se estudian representan su evolución tanto cronológica como funcional y formalmente. De esta manera, el Seagram Building de Mies van der Rohe y Philip Johnson, perteneciente a la tipología de rascacielos, apila regularmente una serie de plantas conformando un único bloque de 157 metros de altura; el 432 Park Avenue de Rafael Viñoly, de 425 metros de altura, repite, al igual que su predecesor, una serie de bloques conformados por apilamientos de plantas regularmente organizadas; y el 111 West 57th Street de ShoP Architects, apila plantas regularmente, pero, al comprimir su masa en altura, logra diversificarlas, abriendo el panorama de súper rascacielos a un mundo que rompe con sus esquemas para apropiarse de su masa. La mutación de edificio monumento, manifiesto físico y representación de un ideal abstracto, a edificio automonumento ha comenzado.
“The Metropolis strives to reach a mythical point where the world is completely fabricated by man, so that it absolutely coincides with his desires. The Metropolis is an addictive machine, from which there is no escape, unless it offers that, too....
Through this pervasiveness, its existence has become like the Nature It
has replaced: taken for granted, almost invisible, certainly indescribable”(03) .
Un edificio automonumental es extrovertido, “es un solipsismo que exalta tan sólo el hecho de su desproporcionada existencia, el descaro de su propio proceso de creación”(04) . Un automonumento es también consciente de su iconicidad, y, como ícono, se reconoce como único, solo. Para lograr su habitabilidad, que se encuentra al límite de la deshumanización, debe aplicar técnicas que subsidien aquello que su funcionalidad excesiva le quita. Para ello, el Modelo Genérico, partiendo de la base que vislumbra el 111 West 57th Street, construye y horada un único bloque sin diferenciar sus partes para consolidarse como un súper rascacielos consciente de sus capacidades y de sus orígenes. Es a través de su variación y de su construcción sistémica que se despega del caso de estudio y confluye en la manipulación de la masa como un elemento dúctil, maleable y repentino, donde cada modificación lleva consigo una serie de acontecimientos concatenados que abren el espectro de posibles usos y organizaciones internas. El modelo, de esta manera, irregulariza e inestabiliza el apilamiento de plantas, tensando y desafiando la tradicional disposición idéntica (o casi idéntica) de pisos sucesivos en donde el ‘bloque originario’ no presenta ningún tipo de resistencia ante la voluntad opresora del arquitecto que lo proyecta."