“Fernando Napoleón”: Un laboratorio global para la revolución del Río de la Plata (1808-1815)
Metadata
Show full item recordAuthor/s:
Bestilleiro Lettini, Santiago
Advisor/s:
Ternavasio, Marcela
Thesis degree name:
Maestría en Historia
Date:
2020Abstract
El proceso que desencadenó las renuncias de los Borbones a la corona de España para cederla
a la Casa de Bonaparte y el rechazo de gran parte de la población peninsular a aceptar al nuevo
rey, José I, es por cierto muy conocido. Ante la inexistencia de canales supletorios que pudieran
prever la ausencia del rey en las leyes fundamentales de la monarquía, las primeras reacciones
frente a la acefalía apelaron al principio de retroversión de la soberanía sobre los pueblos de
los reinos peninsulares a partir de una serie de preceptos escolásticos embebidos de teorías del
derecho natural. Las juntas conformadas para ejercer la autoridad provisional, en calidad de
depósito y tutela de la soberanía del rey cautivo en la localidad francesa de Valençay, echaron
mano a moldes políticos medievales y se organizaron de manera colegiada. En esa operación, violenta y cargada de improvisaciones, yacía un principio fundamental: el consentimiento de
los pueblos como piedra angular de la legitimidad política. El poder del rey dejaba de ser un
hecho dado y providencial, para volverse activo a través de la voluntad de los cuerpos
soberanos2
. Una transición que fue gradual y a la vez traumática. En ese punto de inflexión, los
personajes de Pérez Galdós exhiben, precisamente, la perplejidad nacida de la crisis. Las tres
imágenes que se presentan en Bailén respecto de la autoridad del rey –la defensa acérrima, la
duda taciturna y el boceto más seglar asumido por Santorcaz– sintetizan un repertorio de
respuestas que están en la base de los problemas centrales que se exploran en las siguientes
páginas.
El objeto de esta tesis se recorta, pues, en el estudio de las representaciones que se fueron
construyendo en el seno de las elites políticas y letradas rioplatenses en torno a la figura del
rey ausente desde la acefalía de la Corona hasta los meses posteriores a la batalla de Waterloo
en 18153
. Como ocurrió en la propia península y en el resto de las jurisdicciones
hispanoamericanas, dichas representaciones se diseñaron y reformularon en un diálogo
constante y contrastante con el otro personaje central del proceso: Napoleón Bonaparte. Ambas
figuras condensaron los dilemas del momento y a través de ellas es posible rastrear las
variaciones que se fueron configurando entre soberanía y autoridad, por un lado, y entre guerra
y política, por el otro.