dc.description.abstract | «Max Bill se va definitivamente de Ulm la semana próxima. La
prehistoria de nuestro Instituto ha terminado 1.» De esta forma se
refería Tomás Maldonado, en una carta dirigida a Jorge Grisetti en
septiembre de 1957, a la situación en la Hochschule für Gestaltung
de Ulm (HfG) en esos álgidos momentos. Como resulta bien
sabido, Maldonado formaba parte del cuerpo de profesores de
la prestigiosa escuela alemana casi desde el momento de su puesta
en funcionamiento oficial en 1954. Había llegado a ella, justamente,
por invitación del propio Max Bill, en esos momentos primer
Director de la Escuela y alma mater del proyecto académico primigenio
de la misma. Durante los tres años que mediaron entre la
inauguración oficial de la Escuela y la renuncia de Bill, este proyecto
originario, basado en pensar a la nueva institución como una
Bauhaus rediviva, fue puesto severamente en duda por los mismos
profesores nombrados por Bill, entre los que se encontraban,
además de Maldonado, Otl Aicher, Herbert Ohl, Hans Gugelot,
Vordemberge-Gildewart y gran parte de la plana principal de la
Escuela, incluyendo a su principal mentora, Inge Scholl. | es_AR |